«Más que un museo es el testimonio vivo de la historia y de la presencia de los italianos que ayudaron a construir este país, que se renueva incluso hoy a través de muchos jóvenes italianos y argentinos que estudian, trabajan y hacen voluntariados conjuntamente.»
Recibido por el Director Nacional de Migración Horacio García, con estas palabras el Embajador italiano en la Argentina Giuseppe Manzo abrió su visita al Museo de la Inmigración en Buenos Aires y luego tuvo un encuentro con los dirigentes de la Administración local responsable de la migración, refugiados y seguridad.
Italia y Argentina – reafirmado al final de la reunión – tienen interés en cooperar en estos temas prioritarios para ambos países y a compartir sus experiencias con el fin de definir las políticas capaces de responder a los nuevos desafíos que también afectan a la seguridad. En las próximas semanas, un grupo de trabajo establecido por funcionarios de la Embajada, del Consulado General de Buenos Aires y la Dirección Nacional de Migraciones argentina definirá posibles iniciativas conjuntas en estas áreas.
Tres millones de italianos llegaron a Argentina entre 1860 y 1960 y pequeños grupos de inmigrantes llegaron a principios del ‘800.
A ellos está dedicada la exposición organizada por el museo y hoy visitada por Manzo junto con el Vicerrector de la Universidad Tres de Febrero, Martín Kaufmann.
